jueves, 3 de noviembre de 2016

El valor del las cosas...

¿O el valor del dinero?


Hoy leía un artículo sobre el valor que le damos a un gasto según se produzca o según para qué se produzca, no es lo mismo gastar en un viaje de placer que en uno de negocios imprevisto, no es lo mismo comprar ropa para una fiesta que para ir a la oficina, no es lo mismo comprar un abrigo clásico "de vestir" para tenerlo "porque siempre te saca de un apuro" que un abrigo tendencia que hemos visto en una revista ¿O sí?

Cuando compro ropa siempre pienso que es para siempre. que esa sensación de enamorarme cuando veo la prenda durará eternamente ¿Por qué no me gustará el año que viene si hoy me vuelve loca? Es una costumbre que tengo, comprar pensando en lo que realmente quiero y lo que quiero ahora producto del ansia pero mañana puede que no.

He estado ahorrando para cosas mucho tiempo porque sabía que era amor del bueno, he comprado cosas irracionalmente en momentos que no debía gastar en ropa por el mismo motivo, sabía que era para mi, y no pienso en lo que vale una prenda, lo mismo hay prendas que me enamoran y son de un precio irrisorio que son un precio que da vergüenza reconocer. Y lo mismo pasa con el fondo de armario, ese que se inventaron para que todas compremos un vestido negro ¿Y si no gusta el negro? ¡Pues cómpralo rojo! Pero que te guste hoy tanto como lo hará mañana.

Pero todas y cada una de las piezas de mi armario me dicen cosas y me hacen feliz. Miro ahora esta obra maestra de Burberry y veo los looks de Sienna Miller y pienso que esta misma tarde los podría llevar yo, porque no es una moda, no es una tendencia, es un estilo y puede permanecer en el tiempo si es lo que de verdad te enamora.



Enamoraros cada día de vuestro armario y será eterno. 
Y dejad de mirar las novedades de la semana de la web de turno, una vez al mes si acaso.

Buen jueves a todos :)

2 comentarios:

Evita C. dijo...

Me encanta la última frase...Desde hace un tiempo intento hacer como tú, sólo comprar lo que realmente me enamora, y aunque tenga menos, todo, todo lo que tengo ME ENCANTA.
Gracias patata, siempre tan sabia..

rafarrojas dijo...

A veces pienso en la suerte que tengo de ser gordo, feo y haber asumido que no puedo ser gran cosa. Así puedo permitirme llevar la ropa más cutre que la que me gustaría pero no puede costear mi bolsillo y llevarla hasta que se deshace. A veces cuando me compro ese polo de lacoste intento explicarle al mundo que no lo hago por pijería, sino por que me gusta lo básico, el colorido, el vale pá tó casual, y que me va a durar mil o dos mil años y lo amortizo.
Besote de saludo