Un juego de niños...

Cosas que me hacen feliz esta semana #3

Hace casi un año que pasé al Tiger, bendito Tiger que nunca compras lo que buscas y siempre sales con lo que no necesitas, monísimo todo, eso sí, estaba en búsqueda de una pizarra magnética para apuntar la lista de la compra, ya sé que los que usáis apps para esto sois muy felices, lo sé, pero a mi me gusta apuntar con mi rotu y llevarme una foto de esa nota en mi nevera en mi teléfono, y con un poco de suerte mandársela a Marido y que gestione él.

Total que la pizarra estaba, no contenta con un modelo me llevé dos, uno que es como una hoja de cuaderno con líneas para apuntar lo que te venga en gana y el otro modelo uno mensual para apuntar todos los eventos y compromisos que nos van saliendo, que luego no hay manera de recordar las cosas el uno del otro, menos mal que solo estamos dos.

Y con esa emoción de por primera vez una compra "bien hecha" en Tiger me dispuse a ir a la cola. Maticemos que para salir de esta tienda primero tienes que recorrerla entera,  el "efecto Ikea", y claro ahí es cuando en un momento de debilidad me crucé con el típico juego de quitar piececitas y que no se caiga la torre, meses más tardé descubriría que había comprado una Jenga, de tecnicismos de juegos voy mal.

Me pareció barato e ideal para algún rato muerto en casa, tic, tac, tic, tac,... Casi un año en la caja, lo estrenamos el viernes, menos mal que me costó dos euros, menuda productividad tiene. Y una vez estrenado os diré... ¡Cómo no habíamos jugado antes! Nos reímos infinito y fue ideal acompañar el juego de unas cerves y una cena rica, planazo de #viejovenes. 

Aunque realmente lo que más me gustó es que conseguimos por unos momentos no pensar, no mirar el teléfono, no hablar de cosas feas, estábamos Marido y yo riéndonos a más no poder con un juego de niños. 

Nos complicamos tanto la vida que luego va y te sorprende lo más sencillo. #PatatoConsejo: Comprar una Jenga.

 Buen martes a todos :)